Aferrado al hilo del que penden mis sueños voladores, comienzo un ascenso pausado. Al poco, la plaza y el pueblo, siendo ya una sola imagen, acaban resumidos en un punto. Luego el mundo se reúne en una arruga y, a un tiempo, se desinfla ante mis ojos.
Este es uno de los tres microrrelatos que escribí para la final de las microjustas. El tema era el fin del mundo.
ResponderEliminarPues muy bien representado.
ResponderEliminarUn final apacible.
ResponderEliminarMe gusta muchísimo este micro. Un final del mundo que hasta parece bello...
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