Miro el pasado, ese tapiz de sueños cosidos, esa manta de recuerdos que abrigan instantes. Zurzo finas conversaciones que por el tiempo he falseado, bufandas con polilla añeja. No se si el recuerdo es una cesta de mimbre ajada, o son unos bayas por recolectar.
Ayer me dijeron que en el mar, hay una isla llamada olvido y embarqué al instante. He llegado repleta de recuerdos al olvido. En sus playas las botellas contienen frases, fotos y poemas que alguien olvidó enviar. Las miro inertes y sigo su rastro. Se acaba la costa y comienza el abismo. Aún toco el suelo con mis pies. Aún puedo volver. Mañana es tarde.
Bonito texto. Una fresca y pura relfexión nostálgica.
ResponderEliminarSaludos.
Una metáfora de todo aquello que vamos perdiendo a lo largo del camino. Un irse confundiendo en la nada. Un texto muy meláncolico.
ResponderEliminarAbrazos.
Gracias Moderato y Agus por comentar esta gota en la arena.
ResponderEliminarUn abrazo
Ángeles, es muy poética esta isla del olvido, el primer párrafo me parece precioso, no sé si el recuerdo es una cesa de mimbre ajada o unas bayas por recolectar... quizá son las dos cosas.
ResponderEliminarNo te olvides de volver y seguir contándonos cosas...
Por cierto, hace poco hablando con un lobo de mar me contó que en sus 11 años de navegante ha visto una botella con mensaje ¡una! ¿donde estarán todas las que hemos lanzado con mensajes ya olvidados?
Abrazos
Me ha encantado. El fondo, las palabras, el olvido, el recuerdo y esa isla. Saludos encallados en ella.
ResponderEliminarUn abrazo
Si. Como dicen arriba, es una poética y bella representación del olvido. Olvido es una palabra importante.
ResponderEliminarUn beso, Ángeles.
Poesía pura.
ResponderEliminar¡¡Qué bonito!!
ResponderEliminarYa que hay canapés, aprovecho y me quedo de filandón y de okupa en tu rincón.
Besines Irma.-