Páginas
lunes, 27 de septiembre de 2010
La Caldera Mágica
Cuenta la leyenda que hace muchos años, tres hadas del aire se propusieron descansar en un bello paraje.
El mar que siempre había escuchado sus historias, consintió concederles su pequeño capricho. Así, día tras día, las tres etéreas criaturas anhelaban ver aparecer de entre su fondo, un pequeño paraíso donde reposar sus cansadas alas.
Mimaban ese océano que por las tardes les despeinaba el cabello y por las noches les empujaba hacia las nubes para descansar, siempre mecidas por su caprichosa fuerza.
Una tarde, el mar les entregó junto con un leve rugido una isla con forma de corazón. Se sintieron las hadas más felices del planeta, y quisieron decorarla para que sus futuros habitantes fueran dichosos. La menor de las hadas, colocó pequeños ríos y arroyos, la mediana bosques, y la mayor, en honor a su abuela colocó una Caldera justo en el centro de la isla.
Con el paso de los años la Caldera mágica ha ido creando nuevos paisajes y cuentan que, en su superficie, las nubes bajan a besar la tierra, y que, justo antes del ocaso, puedes ver a las tres hadas jugando al escondite entre algodones.
* La foto es de mi archivo personal, y aunque no os lo creáis, en el momento de hacerla, las tres hadas estaban tomando el sol en una playa de la isla de La Palma.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Este post ha sido escrito para la propuesta de Su
ResponderEliminarhttp://aprendizdepalabras.blogspot.com/2010/09/un-pequeno-lugar-muy-grande.html, el cual os animo a visitar.
El lenguaje es a veces como una brisa que te besa la piel con la intensidad justa.
ResponderEliminarLo has conseguido.
Un beso Angeles
Ay, ay, ay, yo quiero estar allí, en la caldera, recorrer los volcanes, bañarme en playas de arena negra entre los acantilados después de bajar más de cuatrocientos escalones, y comer alfonsiños con mojo y... otras cosas que me callo.
ResponderEliminarDesde que volví de vacaciones sueño todas las noches con volver.
Desde luego que buen trabajo hicieron esas hadas, porque su habitantes sí que son dichosos de tener lo que tienen.
ResponderEliminarMuchísimas gracias.
Sí Elisa, anímate a participar.
Besos
http://elvagabundodelaweb.blogspot.com/
ResponderEliminarIntenso e interesante.
ResponderEliminarBuena postura sobre las hadas.
Saludos desde México Ángela.
Hermoso relato, Ángeles. Que siga la magia.
ResponderEliminarUn abrazo,
PABLO GONZ
Angeles, sabes que yo he visto una de esas hadas en Puntagorda, si encuentro la foto te la envío... o bueno, mejor, haré mi relato a partir de esa foto, qué digo ¡si ya lo tengo hecho!
ResponderEliminarja ja qué magia!!!!!
Besos
Bonito cuento de hadas.
ResponderEliminar(Me chirrió eso de aparecer de entre su fondo)
Beos.
Incluso la nota es bella.
ResponderEliminarSaludos!
Me parece muy tierno este microrrelato. Bonito origen para una isla hermosa.
ResponderEliminarMuy bonito!!!
ResponderEliminarOs agradezco los comentarios, no he podido recomentarlos por falta de tiempo. Espero tener un poquito más a partir de mañana. Espero.
ResponderEliminarUn abrazo a todos.