El líquido me cubría por completo, y mis movimientos se ralentizaban en aquel medio salino, que desprendía, a la vez, cierto olor dulzón. Intentaba sacar la cabeza para tomar aire pero era inútil, aquello estaba sellado como un acorazado. Rodé cara abajo durante interminables segundos, en los que vi autenticas monstruosidades a causa de la lente en la que me encontraba apresado. Al llegar al suelo oí cómo se rompía el embalaje y yo quedaba libre.
Después de aquello no he vuelto a ser el mismo. Aún me pregunto cómo puede una lágrima contener a un hombre.
Ufh. Una lágrima.
ResponderEliminarEl hombre se crea contenedores poderosos.
Espero siempre haya un pulgar dispuesto a ayudar con éste.
Saludos.
Una vez más soy una mujer atrapada en una imagen. Una persona dentro de una lágrima. Ya sabes lo que pienso, ¿que no?, pues eso, excelente.
ResponderEliminarUn abrazo
Me gustó mucho Ángeles. En este tipo de micros uno espera con impaciencia el giro final, la sorpresa. En muchos casos, se produce una decepción. No es tu caso. Es un texto brillante y arriesgado. La metáfora del hombre encerrado en una lágrima me parece magnífica. Felicidades.
ResponderEliminarUn abrazo.
"Aún me pregunto cómo puede una lágrima contener a un hombre". Esta frase vale por todo el relato. Me gustó.
ResponderEliminarBesos con alevosía y nocturnidad.
A veces una frase condensa mil palabras apretándolas tanto que las convierte en innecesarias. El Haiku, los adagios, los mismos proverbios son ejemplos. La última frase del relato tiene ese poder. Una frase difícil de olvidar. Abrazo
ResponderEliminarexcelente
ResponderEliminarexcelente,además la atmósfera de la fotografía acompaña mucho
ResponderEliminarPrecioso texto. Me transmite muy bien la opresión que siente. Y yo no entro en análisis profundos, porque ni sé ni me gusta analizar los textos. Dicho desde el cariño y respeto, conste.
ResponderEliminar(opinión peregrina de alguien sin ni idea)
Me ha traído a la memoria el final de una película de Isabel Coixet, La vida secreta de las palabras.
ResponderEliminarPienso lo mismo que Agus, esperaba algo pero no sabía que, me has sorprendido muy muy gratamente, con la poesía justa.
Abrazos
Precioso, casi visceral y muy poético. Me encantó.
ResponderEliminarEs una idea muy original, Ángeles. Esa frase final da para mucho.
ResponderEliminarUn beso.